El superintendente de Educación Superior, José Miguel Salazar participó en la presentación del informe “Recomendaciones y Orientaciones del Consejo Asesor de Salud Mental para la Educación Superior”, cuyo objetivo es relevar la importancia del bienestar y la salud integral de las y los estudiantes en sus trayectorias formativas y generar recomendaciones de política pública para consolidar una educación orientada al bienestar en todo el quehacer de las instituciones educativas.
En la oportunidad y ante las consultas de la prensa, el superintendente hizo hincapié en la urgencia de abordar los desafíos que enfrentan los campos clínicos en materia de convivencia, anunciando que la Superintendencia de Educación Superior (SES) está elaborando una normativa para resguardar la sana convivencia entre estudiantes y profesionales durante los internados en los campus clínicos, la cual “estará lista a fines de este año”, precisó.
El Consejo Asesor se conformó en 2023 como un espacio participativo, representativo y consultivo conformado por representantes del Ministerio de Educación y el Ministerio de Salud, y reunió a expertas y expertos en salud mental, representantes de las instituciones de educación superior, representantes estudiantiles (Confech, Anaes y Asemech), representantes de la Comisión Nacional de Acreditación, y de la Comisión de Convivencia Universitaria y Salud Mental del Cruch.
Los hallazgos obtenidos dan cuenta de la mayor visibilidad de la temática de salud mental en los procesos académicos y formativos, así como de los desiguales recursos y capacidades con que cuentan las instituciones para enfrentar estos desafíos de manera efectiva y oportuna.
Entre las principales recomendaciones del informe se encuentran temas como potenciales cambios en los planes de estudio de programas y carreras para diseñar currículums saludables, con especial atención a la coherencia entre la carga académica de las asignaturas y la vida saludable; instalar mecanismos que permitan mayor flexibilidad y diversificación a las mallas y planes de estudio; y evaluar la duración de las carreras a partir de un análisis de las cargas académicas a fin de que puedan adaptarse a los proyectos vitales de los estudiantes, a las realidades del mercado laboral y a la promoción de una educación para el bienestar.
En la instancia el subsecretario de Educación Superior, Víctor Orellana, valoró el trabajo del Consejo y expresó que “el informe adopta el principio de la corresponsabilidad, donde el resguardo de la salud mental es tarea de todas y de todos, incluyendo la política pública, los distintos estamentos de las instituciones educativas, y la sociedad en su conjunto, (…) “y creemos que estamos ante unas orientaciones integrales que nos permiten dar un paso adelante en esta materia tan sensible para el Gobierno”.
En la instancia participó también la doctora Soledad Martínez, jefa de la División de Prevención y Control de Enfermedades del Ministerio de Salud, quien señaló que “la salud mental es una prioridad para el Ministerio de Salud y hemos trabajado con el Ministerio de Educación en esta iniciativa que para nosotros es fundamental. Se da además en el contexto de la Ley Integral de Salud Mental que estamos trabajando intersectorialmente y que prontamente esperamos que pueda ser enviada al Congreso. En particular sobre esta línea de trabajo, y específicamente sobre estas recomendaciones, sin duda nos servirán en este camino legislativo, pero también nos aporta para poder fortalecer las coordinaciones con las universidades y el Mineduc y así poder implementar, desde ya medidas que vayan en respuesta a las comunidades de educación superior. Desde el Minsal seguiremos profundizando el cuidado de nuestra población y amplificando con fuerza que nadie está solo o sola para enfrentar sus problemas de salud mental.”